4. Cercanías. El Escorial-Madrid

Me pregunto ¿con qué soñarán estas criaturas en esa apresurada hora? Lo que está claro es que a mí me han quitado el sueño. Su imagen de conjunto tiene una gran presencia. No es fácil quitársela de la cabeza. Uno de ellos tiene una pluma de muchos quilates y una funda de móvil llena de brillantes. Todos son muy delgados y sus canillas viven holgadas en sus estrechísimos pantalones. En Chamartín se apea Truko. Se lleva puesta la camiseta que ha intercambiado con Patti. “No te preocupes en el albergue nos veremos”. En Atocha bajan los otros siete. ¿Qué he sido yo para ellos? ¿Me han visto? Creo sinceramente que no. Es lógico. Cada día queda menos de mí. ¿Dónde estarán ahora? ¿Qué se habrán metido? ¿Me importa? ¿Por qué no me duermo?