Unos amigos del papel se reúnen para cortar y pegar. Suelen quedar en una cafetería con mesas grandes. En una de ellas, depositan los periódicos y revistas del día. Es posible que alguno lleve un libro viejo para descuartizarlo. Toman un café y hablan de sus cosas. De los temas tratados eligen uno para desarrollarlo gráficamente en un collage. En poco tiempo cortan y pegan. Últimamente, más bien, rasgan y pegan. Nadie los firma. Nadie los guarda. Y son felices.