Recuerdo el escándalo que produjo el "Self portrait" de Bob Dylan cuando salió a la venta. Fueron muchísimos los detractores. Los críticos escandalizados. Los fans renegados.
Siempre me gustó el Autorretrato de Dylan. Disfrutaba con toda su producción pero, y precisamente por eso, agradecí que mi admirado autor me contase/cantase los temas que a él le habían influido. Los que cantaba en la ducha. Fue un gesto de humildad que contrastaba con la imagen de divo insoportable del maestro. Imagen que siempre han tragado sus seguidores de carné: ¡Cosas de artista!
La cuestión es que ahora, pasados unos cuantos añitos, los que dijeron digo, dicen Diego y nos preparan para una nueva edición de descartes, Another self portrait, que no conozco pero que ahora soy yo el que la pone bajo sospecha, porque las circunstancias no son las mismas. De momento "Let it be me".
http://www.youtube.com/watch?v=A2oaR0GwTU0
http://elpais.com/elpais/2013/08/22/opinion/1377191879_030317.html