Encorbatado

Tengo el honor de ser condecorado por Alberto Salas con una corbata. Como la de Túa, pero mía. Porque cada una de las corbatas creadas por Helena Santolaya es única. En realidad, esta corbata tenía como destino el pescuezo de pierre d.la, quien ha tenido la gentileza de darle el turno a un señor mayor, posiblemente el más mayor, entre bienvenidos a la república independiente de su casa. Con los nervios, Alberto me ha salido movido. Pero, ¡que bien me ha quedado el techo!