Todos contenemos una urraca, más o menos desarrollada, que nos incita a coleccionar algún tipo de cosa. Este impulso, moderado, nos conduce al ahorro. Descontrolado, al síndrome de Diógenes. Adiestrado, al arte. Marjan Teeuwen es un buen ejemplo de esto último.
http://pytr75.blogspot.com/2010/03/marjan-teeuwen.html
Les doy el enlace al blog de Pieter Van den Dorpe.